El miedo ha cambiado de bando

El miedo ha cambiado de bando

Este de aquí arriba es un video en donde aparece Leticia Trolera. Por cierto, ¿qué ha hecho ella para estar ahí? ¿Cuál es su mérito? ¿Es que acaso ha enseñado las tetas como nuestra heroína anticapitalista, Rita la de las Tetas? No, no las habrá enseñado porque los complejos sobre sus tetas es una de las causas que le han empujado al feminismo. Pero ya hablaremos de belleza en otra ocasión.

Hablemos de la propaganda socialista y de las trolas que dice la Trolera. Dice:
1. Que existe una cultura de la violación.
2. Que se culpa a las víctimas.
3. Que no tiene derecho a ir por la calle vestida como le dé la gana.
4. Que tiene derecho a ir sola por la calle a la hora que ella quiere.
5. Tiene derecho a ir sin miedo a que la violen.

Respuesta a cada punto de arriba con el mismo número de aquí abajo:
1. Eso es la cultura izquierdista. SI existe una cultura de la violación es la izquierda. Decenas de millones de mujeres violadas en Rusia, China, Corea del Norte y Camboya. No sólo existe una cultura de la violación (la izquierda) sino que existe una ideología de la violación (la izquierda en cualquiera de sus sectas)
2. A las víctimas no se puede culpar si no es que tienen parte de la culpa. Por ejemplo, si juegas con fuego y te acabas quemando, el culpable es el fuego y tú eres una víctima. Está claro.
3. Bueno, esto no es el Imperio Soviético, ni Corea del Norte, ni Camboya en sus tiempos gloriosos para el feminismo. Aquí puedes ir vestida como te dé la gana y no como el gobierno te diga.
4. Claro, puedes salir a la calle cuando tú quieras. Princesa. Además, puedes viajar de una ciudad a otra cuando quieras y sin tener que pedir permiso por ser mujer. Todo lo contrario a lo que ha ocurrido en los países izquierdistas.
5. Ese “derecho” no es un derecho. Puedes ir sin miedo. Tienes todo el “derecho”. Pero no tienes ninguna garantía de que no te viole ningún izquierdista.

Trolera:
1. ¿Por qué no te vas a pasear tus derechos, con un par de cojones, a alguna favela de Brasil, a algún barrio inseguro de Manila, a alguna comisaría o barriada de Venezuela, o a cualquier ciudad, pueblo, aldea o campo de concentración de Corea del Norte?
2. Vas a tener el mismo derecho a no tener miedo que tuvieron los rusos, los chinos y los camboyanos. Princesa.
3. Los niños también tienen derecho a tener un embarazo sin miedo y a nacer en un mundo libre. Sin que los aborten.
4. La gente también tiene derecho a vivir sin miedo al izquierdismo. Porque cada vez que hay elecciones y se presenta algún partido de izquierdas, la gente pasa miedo y angustias.

La gente tenemos otros derechos:
1. Derecho a que no se nos robe el dinero con impuestos.
2. Derecho a no cruzarnos por la calle con izquierdistas.
3. Derecho a que una izquierdista no insinúe que los hombres somos violadores.
4. Derecho a vivir en barrios y ciudades en donde no vivan ni entren los izquierdistas.
5. Derecho a que las feministas no nos pongan coches bomba, denuncias falsas, ni nos den tiros en la nuca. Derecho a que nos metan en ningún gulag, ninguna cárcel, ni ningún zulo.
6. Derecho a que no nos peguen, violen o maten por el hecho de ser personas o de ser españoles.

Un hombre por la calle da seguridad. Simplemente por estadística.
Un izquierdista, no. Simplemente por estadística.

Un izquierdista o una feminista en Bilbao han sido sinónimo de tiro en la nuca y coche bomba. Quizás te lo puedan explicar bien los de EH Bildu. Como, la camarada Iranzu.

Iranchu Varela (o Iranzu. Dilo como quieras)
Bueno, otra lesbiana de Bilbao. Otra belleza. Otra que sigue repitiendo lo mismo en Bilbao desde hace tres décadas, con el único resultado de que la gente pase de ellas. Ha sido candidata de EH Bildu y también es fundadora y presentadora de El Tornillo*, espacio feminista del medio de propaganda socialista conocido como La Tuerka (ya sabes, los de Podemos). Pero no es lo único que habla de esta perdedora y fracasada. También habla de ella lo que sale por su boquita. *Es muy extraño porque a ella se ve que le van las tuercas. Y no los tornillos.

Lo que dice la camarada Iranzu:
1. Vais a casa por la noche, solas. Y oís unos pasos por la espalda. Y os giráis y es una mujer. Qué sentís.
a) Alivio porque sabes que no eres la única que va a casa sola y no ha conseguido ligar.
b) ¿por qué se ha puesto detrás de mí? ¿Por qué me quiere violar? ¿Si no por qué iba a hacerlo?
c) ¿Por qué va por la misma calle teniendo otras por donde ir?
Ah, no, perdón, eso es para los hombres.

Lo que no sabe es lo que se preguntará la mujer que va detrás de la camarada Iranzu. Vete a saber, por ejemplo:
Ahí va Iranzu, otra vez sola a casa. Es una perdedora y una fracasada. No es que no vaya a casa con ningún tornillo, es que ni siquiera va con ningún torniyo ni con ninguna tuerka. Porque claro, tuerca no va con tuerka.

¿Y qué puede pensar un hombre que vaya detrás de la típica Iranzu Varela y no lo sepa hasta que ella se gire?
a) ¿que es una pervertida?
b) ¿que es una pervertida socialista que quiere que le pagues alguna cerveza en algún bar abierto?
c) ¿que es una pervertida que quiere casarse contigo para robarte la casa y el sueldo con el divorcio?
d) ¿por qué me mira, es que quiere ligar conmigo, o qué? Qué se ha creído, todas las mujeres son iguales.

Lo mejor de todo es cuando les responden el resto de las lesbianas. “Alivio”, “alivio, claro”. Vaya montaje cinematográfico más cutre y más ridículo. Vaya, que esto más que la Sexta parece la Tuerka. Y otra dice, no te lo pierdas, dice: “pues mucha más tranquilidad que si fuera un hombre”. Tiene que ser de Bilbao, por cojones. Si no ese nivel de ausencia intelectual, no lo puedes encontrar tan fácilmente.
1. Un hombre da mucha más tranquilidad por la noche que una mujer porque un hombre te va a poder defender, no sólo de un hombre, sino también de otra mujer. Vamos, que la coge a una tarada de esas, le mete una hostia bien dada y se le acaban las tonterías, rápidamente.

Y prosigue la camarada Iranzu:
1. Si es un hombre sentís… (pausa para darle emoción, terror, tensión y dramatismo)…miedo.
2. Que la mitad de la población vayamos por la calle con miedo.

No, la mitad de la población no va por la calle con miedo.

Toda la sociedad somos víctimas de las feministas y de sus campañas. Como esta:
1. Campaña de agitación y propaganda.
2. Campaña de culpabilización y de hostigamiento a la víctima.

Porque, hay que ponerse en contexto, lo primero. Pues eso, las típicas preguntas: qué, cómo, dónde, por qué, para qué, quién, desde cuándo. En este caso el desde cuándo es importante. Esto que oís a la camarada Iranzu y a su coro, no es algo más que una campaña de agitación y propaganda; y de culpabilización y de hostigamiento a la víctima: la sociedad y, concretamente, los hombres.
1. Quién: ETA.
2. Desde cuándo: desde principio de la década de los 80.
3. Dónde: comunidad autónoma vasca y Navarra. Principalmente en la CAV.
4. Qué: campaña de culpabilización y de hostigamiento, mediante la agitación y propaganda.
5. Para qué: para derrotar al enemigo.
6. Por qué: porque quieren implantarnos el feminismo y el socialismo.

Pero, expliquemos en detalle de qué se trata.
1. Vas andando a cualquier hora del día por una calle céntrica de Bilbao y una izquierdista se gira, bien porque esté a tu lado, porque se haya puesto a tu lado, porque te hayas puesto a tu lado o porque os hayáis incorporado en la misma calle y en el mismo sentido. También incluso porque ella iba por delante y ha aminorado el paso hasta que ha tenido tu misma velocidad. O porque tú lo has reducido, por el motivo que sea. Esto también puede ocurrir en un local comercial o estatal: bar, biblioteca, supermercado, tienda de ropa.
2.Entonces, la puerca de turno te mira como si fueras un violador. Con la mirada fija, mirándote a los ojos incluso. Sin miedo, como el sin miedo que hay que tener para andar sola borracha y drogada hasta las patas por cualquier calle de Bilbao a altas horas de la madrugada. Pero bueno. Era de imaginar. Ahora mismo te estás preguntando qué tipo de mirada. Bueno, esa mirada que pone el coletas (Pablo Iglesias) cuando quiere dar a entender que ha juzgado y sentenciado a alguien. Esa mirada que siempre tuvieron los de ETA: te miran fijamente y ya eres culpable de algo. Aunque no sepas ni siquiera de qué eres culpable. Porque esa mirada tan intensa y, además, hecha por un izquierdista, sólo quiere decir una cosa: eres culpable, eres un criminal. Sí, esa mirada de perdona vidas y de denuncia falsa que te está diciendo que no tienes derecho a la vida y que no sabe si te la va a perdonar hoy.

No te puedes imaginar lo que es oír a una izquierdista, a una de la izquierda abertzale, decir que va por la calle con miedo. No te puedes ni imaginar qué sensación te recorre el cuerpo.

El miedo ha cambiado de bando.