Fiestas de Bilbao. Fiestas en Bilbao. Incluso la cuestión de la preposición tiene su importancia. Las fiestas de Bilbao que en principio contaban con un número reducido de espectáculos pasó a ser con el tiempo un instrumento político de la izquierda. Así hemos tenido durante décadas nuestro propio 15M en el Arenal durante una semana de agosto. Las organizaciones políticas de izquierda se han apropiado del espacio público para beneficio económico y político. En el parque del Arenal y detrás del Arriaga se han colocado casetas o carpas en donde la actividad principal era la venta de bocadillos y bebidas alcohólicas. También estas organizaciones políticas ofrecían espectáculos, de pretendida música, gratuitos. En resumidas cuentas, hay que liberar las fiestas de Bilbao de la política.
1. Las fiestas de Bilbao han sido utilizadas y manipuladas por la izquierda. Han monopolizado el espacio físico.
2. Se han apropiado indebidamente de las fiestas. Apropiación indebida.
3. No hay igualdad para el resto de organizaciones incluso aunque no sean políticas. Como por ejemplo religiosas o de cualquier otro tipo. Quién sabe, quizás la Iglesia quisiera montar una gran carpa. Poner una caseta bien grande donde no se celebren espectáculos sonoros de pretendida música sino algún coro u otro tipo de actos, como actos religiosos. Tomando simplemente en cuenta qué habría que repartir entre cualquier tipo de organización tanto religiosa como comercial, podría tener acceso a pujar por ese espacio del Arenal. De acuerdo a que por ejemplo si quieren alquilar ese espacio público ofrezcan una cantidad de dinero en la subasta.
4. No solo se trata del recinto de las casetas, que en Bilbao se llaman chosnas (txosnas), sino de que cualquier empresa, organización de empresas, por ejemplo, un grupo de bares o restaurantes, puedan organizar en una o varias calles actividades festivas.
5. El programa de las fiestas es el día de la marmota. No ha variado nada, sigue lo mismo de siempre y además pagado de nuestro dinero.
6. Ciertamente cualquier tipo de empresa podría tener derecho a hacerse su propio programa de fiestas y a pedir al Ayuntamiento o a los vecinos de esa calle permiso para poner lo que sea en ese espacio durante el tiempo que le dejen los vecinos. Vecinos y comerciantes. Es el libre mercado.
7. El que haya empresas ajenas a una calle o un barrio o incluso los propios comerciantes que tengan que negociar con los vecinos y otros comercios por atraer clientes a su zona o a sus negocios haría inevitablemente que la calidad de los eventos organizados aumentara. No sólo eso sino que además estarían de acuerdo con los vecinos porque los vecinos las aprobarían.
8. Es muy curioso, por ejemplo, que en el centro de Bilbao las terrazas solo se puedan poner durante la Semana Grande. Esas terrazas que no son las habituales terrazas que ocupan la acera sino esas que muchas veces ocupan la calle, que ocupan las plazas de aparcamiento. Y sin embargo es casi la única época del año en la que no va a llover y la gente va a poder estar a gusto en la calle en vez de pasar calor o sufrir el aire acondicionado dentro de los bares. ¿Por qué esos restaurantes no pueden negociar con los vecinos si les permiten poner ahí durante más tiempo las terrazas?
9. Hay otra cuestión que es las fiestas fuera de horas. Por ejemplo los fuegos artificiales se tendrían que echar nada más anochecer y así no molestar a nadie con el ruido. Y eso en el caso de echarlos porque, ¿quién los paga? Los pagamos todos. Y quien quiera fuegos que se los pague. Lo mismo eso como las meadas que dejan la última noche por todas las calles de Bilbao. Resulta que no hay bares abiertos y el responsable de esas miradas es el Ayuntamiento porque ni se encarga de dejar que haya bares abiertos para que vayan a mear, o que haya bares sólo para que vayan a mear previo pago, o que haya por la ciudad váteres públicos de pago. Bien poniéndolos el ayuntamiento o bien dejado que el libre mercado se encargue de ello. Lo más lógico. El resultado es que la ciudad entera huele a meada porque esa noche se han acabado las fiestas con el entierro de la sardina y no hay ni un bar abierto en donde los humildes borrachos puedan orinar en un recinto adecuado.
10. ¿Por qué tienen que ser las fiestas de Bilbao?
Bien está claro que cada barrio tiene sus fiestas. Son más pequeñas, siempre están las organizaciones políticas por medio , pero lo suyo sería que la gente organice las fiestas cuando quiera: varias calles o barrios se quieren juntar para organizar unas fiestas y pagárselas de su bolsillo que las organicen y así el tiempo, la competencia y el libre mercado dirán qué acaban siendo las fiestas de Bilbao.
11. El ejemplo del corte de calles es algo que puede descolocar un poco de principio pero unas fiestas pueden durar varias semanas simplemente porque la calle tampoco está cortada todo el día y menos por la noche. Entonces depende de la calle, depende del barrio y depende de todo. Además es una cuestión de negociar con los vecinos negociar con los comercios y tener en cuenta si esa calle es esencial la circulación.
12. Esto también ayudaría a que en otras épocas del año la actividad civil y comercial se vea animada con cualquier tipo de fiesta. Fiesta o acto festivo. Y no necesariamente en agosto cuando la gente se va de vacaciones.
13. Durante cuántas horas, cuántos días, cuántos años la izquierda no sólo ha monopolizado el espacio festivo si no ha monitorizado todas las calles de Bilbao cortándolas con sus manifestaciones pacíficas o destructivas. ¿Hay algún problema para que la gente pueda decidir organizar fiestas para el beneficio de la ciudad?
14. Presupuesto fiestas de Bilbao. Esto es lo más escandaloso de todo. No el dinero que se gasta sino el dinero que se ha cogido a otro sin que hayan dado el permiso. Sustraído por medio de impuestos, gastado en las fiestas. Si hay gente que quiere gastarse 2 millones y medio de euros en una fiesta que se junte en un grupo, que pongan el dinero y que se monten la fiesta. Qué fácil es irse de fiesta con el dinero de los demás. Así así se lo pasa bien cualquiera.
1. Fiestas, programa
2. Se reduce un 10% el presupuesto para la Aste Nagusia bilbaína 11/07/2012
“respecto al año pasado, donde contaban con un presupuesto de dos millones y medio” ¿” millones y medio?
¿Quién y cuándo nos ha pedido ese dinero las “fiestas”? ¿O es que nos lo han quitado con impuestos? Quien se quiera ir de fiesta, que se lo pague de su bolsillo. El ayuntamiento no puede ser una empresa organizadora de eventos, sino dedicarse a lo suyo.